Y sin embargo se mueve
Sin embargo si usted se esfuerza un poco en hurgar en su memoria enseguida le llegaran los recuerdos de esas mañanas grises en que levantarse de la cama se ha convertido en una tarea heroica. Son esos días en que parece fallar algo en nuestra conexión con el mundo (a veces es culpa nuestra, a veces es culpa del mundo, la estadística varia en función de cada cual).
Para lidiar con esos días apocalípticos vale cualquier cosa. Una de las variantes más populares consiste en escapar a un mundo de fantasía que nos permita olvidar, al menos de momento, el malestar que los embarga. Es así como en un abrir y cerrar de ojos nos hemos ganado el premio gordo de la lotería y somos multimillonarios (de los que miran por encima del hombro a Bill Gates). Es tiempo entonces de hacer la lista minuciosa y ordenada de los primeros gastos (mientras nos lavamos los dientes), para luego pasar a la lista de países a visitar (mientras terminamos de vestirnos) y concluir con el listado de autos deportivos y casas en playas desiertas (esto ya en el desayuno).
El de la lotería es uno de los sueños mas comunes, pero hay muchos otros para escoger: convertirse en un actor (actriz) de cine conocido en todo el mundo, escribir una novela que venda millones de ejemplares y además logre hipnotizar a los críticos, convertirse en un atleta estelar o en el ser mas sexy sobre la tierra. Y puede ser que a primera vista algunos de estos sueños nos parezcan tontos (y otros mas tontos aun) pero su eficacia está comprobada y si usted sigue haciendo memoria se dará cuenta de que ese día fatídico en que se levanto sintiéndose peor que una cucaracha, logró, a pesar de todos los pesares, hacer sus cosas de siempre y luego irse al trabajo como todos los días. Y gracias al "sueño tonto" no se cortó las venas, ni intentó matar a nadie camino al trabajo (es cierto que le gruñó a las personas que accidentalmente chocaron con usted, pero tomando en cuenta las circunstancias eso no pasa de ser un pecadillo sin importancia).
Y a mi esto de los sueños me funciona como a todo el mundo. Sin embargo a veces más que soñar, intento hacer algún recuento de cosas buenas que hayan pasado y a las cuales en ese momento no les di la importancia que requerían. Y justo ayer me levante (aparénteme sin razón) con el animo parecido al que tenían los tripulantes de las carabelas de Cristóbal Colon el día antes de toparse con América (porque descubrir lo que se dice descubrir no descubrieron nada). Sin embargo accidentalmente me encontré un periódico viejo en el baño (fue casualidad, juro que no se que hacia ese periódico ahí) con una noticia que inmediatamente me cambió el animo para bien y me hizo hacer un recuento de cosas positivas que había dejado pasar injustamente.
El articulo en cuestión apareció en el periódico Granma del lunes 21 de mayo, y su titulo era: "Sustituyen ventanillas en ómnibus de transporte público". En menos de 10 párrafos la autora del artículo nos cuenta como se ha comenzado a trabajar en los ómnibus con problemas de ventilación para dotarlos de las ventanillas que permitan el correcto flujo de aire que corresponde a un país tropical como Cuba.
Y esta noticia podría pasar inadvertida para mucha gente (sobre todo los que tienen automóvil) pero no para el millón y medio de personas que en mi cálculo conservador usan diariamente el transporte público en esta capital. Y este servidor, que tiene el orgullo de pertenecer al tan selecto grupo del millón y medio, llegó a tomarse ese asunto de la ventilación tan a pecho que terminó escribiendo un post titulado "Calentamiento local" que mereció una buena cantidad de comentarios de ustedes mis humildes lectores.
Ya de un mejor animo luego de leer la noticia, pude darme cuenta de que había otros asuntos similares que de alguna forma u otra habíamos tocado en el blog y que para felicidad de la gran mayoría, han terminado resolviéndose. Y me sentí un poquito mejor al darme cuenta de que "Suite Habana" y "Fresa y chocolate", posiblemente las dos mejores películas cubanas de los últimos 20 años, al fin fueron mostradas en la televisión cubana. Y continué sintiéndome mejor al darme cuenta de que la disposición oficial que prohibía la entrada a Cuba de reproductores de video y dvd por parte de particulares fue finalmente derogada.
Y a lo mejor a algunos de ustedes todo esto les parezca poca cosa, y piensen que el asunto no es como para tirar cohetes y salir de fiesta, y puede ser que tengan razón. Sin embargo, hasta en la mas simple de las matemáticas, algo es mejor que nada y mi humilde lista, para arreglar el ánimo en una mañana desabrida me parece suficiente (por ahora :)