« Home | Cortas de Mayo » | Rezagos del lado oscuro... » | La incógnita del talento ya esta resuelta: X Alfonso » | ¿Quien le pone el cascabel al clásico? » | Los críticos, la alergia y las palabras » | Joaquín y la Habana, la Habana y Joaquín » | El fin y los medios » | Una reflexión » | Frases de Savater » | Adivinanza »

La magia de la Buena Fe

Un concierto mágico, en un Karl Marx reparado con baños nuevos (mira al final en lo que uno se fija) y repleto de personas dispuestas a dejarse llevar durante 2 horas y algo por la buena fe de Israel, Yoel y el resto de los músicos.

El nuevo disco parece excelente, con el equilibrio necesario entre ideas profundas y melodías para todos, equilibrio que permite seguir haciendo arte del bueno y a la vez pagar la libra de fruta bomba en los mercados.

Las canciones tocan muchísimos temas y una vez mas Israel libera ese particular talento suyo para hacer poesía con temas usualmente banales. Ya lo ha demostrado antes haciendo hermosísimas canciones al camello, o a un espermatozoide. Ahora le toca el turno a unas buenas nalgas de mujer, un asteroide que puede impactar la tierra, o el personaje de una novela policíaca (Mario Conde).

No hay mucho mas que decir, oír y oír el nuevo disco. De momento termino con la letra de la que puede ser la canción mas conflictiva del disco, conflictiva por sincera, por veraz, por decir cosas que atragantan y molestan a los que están acostumbrados a hablar y a pensar por los demás.

Gracias por el fuego

Como decía Campoamor, ten paciencia corazón, que es mejor a lo que veo
deseo sin posesión, que posesión sin deseo
déjame ganármelo....
no me lo cobres luego a pedradas

(estribillo)
No me regales mas nada, no me regales mas nada
déjame ganármelo yo
no me lo cobres luego a pedradas

Que yo no soy un medalla de oro en el torneo de las sugerencias
yo solo quiero compartir un logro que no se base en extrema paciencia
para al final no arribar al problema: un buen guión, mala puesta en escena
que no me basta saber mal ajeno, justificando mi propia desgracia
ni recitar orgulloso las siglas con que se nombra a caricia y falacia
y ya no mas salaciones al tiempo, que nos mandó con los 4 elementos:
gracias a la tierra
gracias al viento
gracias al agua
y gracias por el fuego

(estribillo)

Pero como no voy a quererte, ni de juego quiero irrespetarte
lo que pasa es que tanto te quiero que con la sonrisa no voy a engañarte
de lo que trae la cigüeña jamás me he confiado porque cambian la ruta y nos dejan colgados
aparta ese pezón que se ve tentador, mi camino lo quiero a sudor
quiero ser yo, ser yo, ser yo

(estribillo)

Y que no venga un candil de la calle a coquetearme con la ultima moda
que mis bolsillos saben los detalles y repetírmelo ya me incomoda
una plegaria pal codo con codo, pero mesura pal boca con boca
porque comparto la misma comida, tengo el derecho a añorarme por dentro
o tu prefieres que diga mentiras cuando nos fallan los experimentos
y yo lo siento pero se me empinan verdades de frente al tiempo
gracias a la tierra
gracias al viento
gracias al agua
y gracias por el fuego

(estribillo)

Llegué aquí por casualidad y me ha gustado mucho leer tu blog por la manera sencilla y desenfadada con la que escribes. No tuve el privilegio de ir al concierto pero sí el "presagio" de que alguien rápidamente escribiría sobre él, sólo te faltó tocar un pequeño detalle, cómo coño conseguiste las entradas?

Del duende del bache.

Hay una frase que dice: "el que tiene un amigo tiene un central".

Ahora tener un central está un poco devaluado, asi que podriamos actualizar la frase a: "el que tiene un amigo tiene una termoelectrica" o "el que tiene un amigo tiene un grupo electrogeno".

En fin, las entradas las consiguio un socio y me las hizo llegar de muchisima "buena fe".

"el que tiene amigo tiene un central"... Nelsito la dice todo el tiempo, y yo la creo... y bueno, sea central o batería, de da luz y calor que ni qué...

espero seguirte viendo por mi bloguito... y si ves a mi novio caminando por la Habana, dile que qué hace aplanando las banquetas...

Publicar un comentario

Acerca de mi

Yo:el cubano de la isla
De:La Habana, Cuba
Soy:un tipo común que mira y mira y cada vez entiende menos

 

Ya Cortazar lo contó una vez de esta forma...


La primera vez que vio la isla, Marini estaba cortésmente inclinado sobre los asientos de la izquierda, ajustando la mesa de plástico antes de instalar la bandeja del almuerzo... Una isla rocosa y desierta, aunque la mancha plomiza cerca de la playa del norte podí­a ser una casa, quizás un grupo de casas primitivas. Empezó a abrir la lata de jugo, y al enderezarse la isla se borró de la ventanilla; no quedó más que el mar, un verde horizonte interminable. Miró su reloj pulsera sin saber por qué; era exactamente mediodía.